Jueves 27 de Diciembre de 2018
Las Galaxias de las Antenas, catalogadas como NGC 4038 y NGC 4039, son un dúo de galaxias distorsionadas en colisión. La designación conjunta de las dos galaxias es Arp 244. Esta imagen muestra observaciones de ALMA, realizadas en dos longitudes de onda diferentes durante la fase inicial de pruebas del observatorio. La mayoría de las observaciones utilizadas para crear esta imagen de las galaxias de las Antenas se obtuvo usando solo 12 antenas interconectadas, con pequeñas separaciones entre sí. Esta es la mejor imagen que se haya obtenido de las galaxias de las Antenas en ondas milimétricas y submilimétricas, lo que abre una nueva ventana al Universo submilimétrico. Las observaciones de ALMA muestran algo que no puede ser detectado a longitudes de onda en luz visible o infrarroja, las densas nubes de polvo cósmico y gas donde se forman estrellas.
Las observaciones de ALMA fueron realizadas en longitudes de onda milimétricas y submilimétricas específicas de las bandas 3 y 7, ajustadas para detectar moléculas de monóxido de carbono en las nubes de hidrógeno donde se forman las estrellas, que de otra manera serían invisibles. Las masivas concentraciones de gas se encuentran no solo en el corazón de cada galaxia, sino también en la caótica región donde éstas galaxias están colisionando. Aquí, la cantidad total de gas es de miles de millones de veces la masa de nuestro Sol, una rica reserva de material para futuras generaciones de estrellas. Observaciones como estas serán vitales para ayudarnos a entender de qué manera las galaxias en colisión pueden activar el nacimiento de nuevas estrellas. Están situadas a unos 70 millones de años luz de distancia de la Tierra, y ubicadas en dirección a la Constelación de Corvus.
Las observaciones de ALMA fueron realizadas en longitudes de onda milimétricas y submilimétricas específicas de las bandas 3 y 7, ajustadas para detectar moléculas de monóxido de carbono en las nubes de hidrógeno donde se forman las estrellas, que de otra manera serían invisibles. Las masivas concentraciones de gas se encuentran no solo en el corazón de cada galaxia, sino también en la caótica región donde éstas galaxias están colisionando. Aquí, la cantidad total de gas es de miles de millones de veces la masa de nuestro Sol, una rica reserva de material para futuras generaciones de estrellas. Observaciones como estas serán vitales para ayudarnos a entender de qué manera las galaxias en colisión pueden activar el nacimiento de nuevas estrellas. Están situadas a unos 70 millones de años luz de distancia de la Tierra, y ubicadas en dirección a la Constelación de Corvus.