Lunes 2 de Mayo de 2016
El Telescopio Espacial Hubble sondea una burbuja brillante de gas y polvo que rodea una estrella moribunda, revelando una gran cantidad de estructuras nunca antes vistas. El objeto, llamado NGC 2371, es una nebulosa planetaria, los restos brillantes de una estrella similar al Sol. La estrella remanente es visible en el centro de NGC 2371, es el núcleo supercaliente de la antigua gigante roja, ahora despojada de sus capas exteriores. Su temperatura superficial es un abrasador 133.300 grados centígrados. NGC 2371 se encuentra a unos 4.300 años luz de distancia de la Tierra en la Constelación de Géminis. La imagen del Hubble revela varias características notables, sobre todo las prominentes nubes de color rosa en lados opuestos de la estrella central. Este color indica que es relativamente fría y densa, en comparación con el resto del gas que rodea la nebulosa. Lo que también llama la atención son los numerosos puntos muy pequeños en rosa, marcando nudos relativamente densos y pequeñas catidades de gas, que también se encuentran en lados diametralmente opuestos a la estrella. Estas características parecen representar la expulsión de gas de la estrella a lo largo de una dirección específica.
La dirección del chorro ha cambiado con el tiempo durante los últimos miles de años. La razón de este comportamiento no se entiende bien, pero podría estar relacionado con la posible presencia de una segunda estrella que orbita la estrella central visible. Una nebulosa planetaria es una nube de gas en proceso de expansión, expulsada por una estrella que se acerca al final de su vida. La nebulosa brilla debido a la radiación ultravioleta del remanente central de la estrella caliente. En sólo unos pocos miles de años la nebulosa se disipará en el espacio. La estrella central se enfriará entonces gradualmente, y se convertirá en una enana blanca, la etapa final de la evolución de casi todas las estrellas. La imagen del Hubble de NGC 2371 es una imagen en falso color, preparada a partir de exposiciones tomadas a través de filtros que detectan el espectro de luz del azufre y el nitrógeno en color rojo, el hidrógeno en verde, y el oxígeno en color azul. Estas imágenes fueron tomadas con la cámara Wide Field Planetary 2 del Telescopio Espacial Hubble, como parte del programa Hubble Heritage.
